El Centro de Reinserción Social número 3 de Ciudad Juárez ha alcanzado un nuevo récord, albergando a más de 4,100 hombres privados de su libertad por delitos federales y del fuero común, tanto en proceso penal como sentenciados.
De acuerdo con el Cuaderno Mensual de Información Estadística Penitenciaria, hay 4,131 reos esperando avances en su proceso o cumpliendo una sentencia, lo que representa una sobrepoblación del 44.85%, la más alta registrada hasta la fecha.
Sin embargo, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado reporta en los Cuadernos Mensuales que hay 2,852 espacios disponibles, lo que explica la magnitud de la sobrepoblación. Según el Censo Nacional de Sistemas Penitenciarios Estatales de 2023, había 2,806 celdas con 3,160 camas disponibles.
Si se considera el dato del censo en lugar del proporcionado por los cuadernos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), el exceso sería de poco más del 32%. La discrepancia en los datos no ha sido aclarada por la dependencia estatal.
El censo indica la existencia de 700 celdas individuales y 2,106 colectivas, todas con agua corriente, tazas de baño con divisiones para privacidad, lavabos, espacios para aseo personal, ventanas, drenaje y luz eléctrica. No obstante, carecen de acondicionamiento para temperaturas extremas y ventiladores, a pesar de que el censo del año anterior, con datos de 2022, indicaba que contaban con todos los servicios.
Las 3,160 camas no se especifica si son exclusivamente para personas privadas de la libertad con o sin sentencia, confirmando las observaciones previas de la Comisión Nacional de Derechos Humanos sobre la falta de división entre procesados y sentenciados.
Según los datos provistos al Organismo Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social de la SSPC, hay 1,279 reos por encima del límite de 2,852, de los cuales 1,516 están en proceso por delitos del fuero común y 347 por delitos federales, mientras que 1,993 están sentenciados por delitos del fuero común y 275 por federales.
Esto significa que el 45% de la población carcelaria aún está en proceso, bajo medidas cautelares privativas de la libertad.
