Walmart reportó resultados positivos en el primer trimestre del año impulsados por el crecimiento de sus ventas en Estados Unidos. Sin embargo, la empresa advirtió sobre el impacto del aumento de precios y la incertidumbre que generan las tensiones comerciales impulsadas por la política arancelaria de Donald Trump.
La cadena registró ganancias por 4,500 millones de dólares, una baja del 12.1% respecto al año anterior, aunque superó las expectativas de los analistas. En contraste, sus ingresos crecieron 2.5%, alcanzando los 165,600 millones de dólares. Las ventas comparables en sus tiendas estadounidenses subieron 4.5%, especialmente en la categoría de comestibles.
“Haremos todo lo posible para mantener precios bajos, pero dada la magnitud de los aranceles, incluso en los niveles más bajos, no podemos absorber toda la presión inflacionaria”, señaló Doug McMillon, director general de Walmart.
Aunque la reciente distensión entre Estados Unidos y China fue bien recibida por la compañía, McMillon advirtió que los aranceles vigentes aún representan una carga considerable, afectando sobre todo productos electrónicos y juguetes.
También mencionó que las tarifas impuestas a importaciones de países como Costa Rica, Perú y Colombia han encarecido artículos como plátanos, aguacates, café y rosas.