Con el inicio del periodo vacacional de Semana Santa y la previsión de una alta afluencia de visitantes en los puntos turísticos del estado, las brigadas anti-incendios forestales han intensificado sus esfuerzos de prevención y combate, centrándose especialmente en la Sierra Tarahumara.
Más de 1,300 personas, entre técnicos y voluntarios de instituciones como la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), se han unido a estos operativos, distribuyéndose estratégicamente en municipios clave como Chihuahua, Ocampo, Temósachic, Moris, Guerrero, Bocoyna, Guachochi, Urique, y Guadalupe y Calvo.
El objetivo principal de estas cuadrillas es supervisar los centros recreativos más concurridos, proporcionar material informativo y orientar a los turistas sobre el uso responsable del fuego. Se estima que más del 90% de los incendios forestales son causados por acciones humanas imprudentes, lo que hace vital la concientización y la educación sobre medidas preventivas.
Estas brigadas cuentan con personal técnico altamente capacitado y se han ubicado estratégicamente en campamentos y torres de detección. Además, disponen de 37 vehículos y el equipo necesario para llevar a cabo diversas tareas de combate contra incendios.
Los puntos críticos como la carretera Chihuahua-Juárez, El Vallecillo, Riva Palacio, Majalca, Satevó, Las Tinajas, Cañón de Namúrachi y Ejido Francisco I. Madero, serán atendidos de manera prioritaria por las brigadas oficiales estatales.
Gracias a estas labores preventivas, del 18 al 24 de marzo se logró mitigar el impacto de dos incendios forestales en comunidades de los municipios de Balleza, Batopilas, Bocoyna, Buenaventura, Chínipas y Guadalupe y Calvo, con la participación activa de 144 personas combatientes.