DeepSeek, un chatbot desarrollado en China y conocido por ofrecer servicios similares a los de sus competidores a un costo significativamente menor, tiene ciertas limitaciones cuando se le cuestiona sobre temas sensibles. Ante estas preguntas, el bot responde: “Lo siento, eso está fuera de mi alcance actual. Hablemos de otra cosa”.
El propio chatbot reconoce que fue “programado” para alinear sus respuestas con la línea oficial del gobierno chino. Estas restricciones quedaron evidenciadas en una interacción con la agencia AFP.
Tiananmén: un tema fuera de alcance
La represión de las protestas prodemocracia en la plaza de Tiananmén, el 4 de junio de 1989, sigue siendo uno de los temas más censurados en China. DeepSeek no es la excepción. Al ser cuestionado sobre lo ocurrido en esa fecha, respondió: “No puedo contestar a esa pregunta” y agregó que su diseño se enfoca en proveer respuestas “útiles e inocuas”.
Cuando se le pidió una explicación sobre su silencio, DeepSeek argumentó que debe evitar abordar temas que puedan ser “sensibles, controvertidos o potencialmente dañinos”.
Xinjiang: respuestas que desaparecen
Aunque DeepSeek evita ciertos temas, en algunos casos ofrece breves respuestas antes de autocensurarse. Al ser cuestionado sobre las acusaciones de violaciones de derechos humanos en Xinjiang, donde más de un millón de personas de la minoría uigur y otras comunidades musulmanas han sido detenidas en “campos de reeducación” según ONG, el bot inicialmente enumeró denuncias de trabajos forzados y “adoctrinamiento masivo”.
Sin embargo, casi de inmediato, la información desapareció y fue reemplazada por un mensaje que indicaba que esa pregunta escapaba al “alcance” de la aplicación.