Apenas este pasado día martes 10 de mayo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró que el tema de la inflación en este país es su prioridad, esto luego de que los precios de la gasolina subieron a niveles históricos a pesar del esfuerzo del gobierno por estabilizarlos.
El precio por galón de gasolina alcanzó los 4.37 dólares, el precio más alto registrado desde el año 2000.
En El Paso el precio de la gasolina regular alcanzó los 4.10 dólares por galón, cuando hace apenas una semana el galón tenía un costo de 3.93 dólares, lo que representa un aumento de 17 centavos en una semana.
“Sé que las familias de todo Estados Unidos están sufriendo debido a la inflación”, dijo Biden el martes en un discurso en el complejo de la Casa Blanca. “Quiero que todos los estadounidenses sepan que me estoy tomando muy en serio la inflación”.
Tomando en cuenta la inflación, este precio está por debajo del aumento histórico ocurrido en julio del 2008, durante la crisis bancaria en Estados Unidos.
Este aumento se debe a dos factores principales: una economía fuerte con una tasa de desempleo de apenas 3.6 por ciento y la guerra en Ucrania, la cual ha reducido la oferta de petróleo y ha generado restricciones a la importación de petróleo ruso, lo que genera que el precio por barril de petróleo se mantenga por encima de los 105 dólares por barril.