La frontera norte mexicana refleja la tensión comercial. Líderes transportistas reportan aduanas con poca actividad, mientras que los inversionistas se mantienen cautos. La presidenta Claudia Sheinbaum espera un diálogo con su homólogo estadounidense, mientras las comunicaciones con funcionarios de ese país se intensifican.
El martes, la Casa Blanca anunció una pausa de un mes a los aranceles al sector automotriz, lo que ha generado expectativas en México sobre un posible acuerdo bilateral.
“Es un momento crucial para México dependiendo de lo que suceda estos días”, expresó Sheinbaum en su conferencia matutina del miércoles. “El secretario de Comercio de Estados Unidos ya busca un esquema de acuerdo… un esquema distinto”.
Ese mismo día, Trump ajustó los aranceles generales del 25% impuestos a Canadá y México, dejando fuera al sector automotriz, una de las áreas más relevantes para las relaciones comerciales bilaterales. El anuncio se dio después de una conversación con los directivos de Ford, General Motors y Stellantis.
Estados Unidos ha justificado las medidas como parte de su estrategia para frenar el tráfico de fentanilo, pero Trump también ha mencionado que los aranceles buscan reducir el déficit comercial y fortalecer la industria local.
Hasta el momento, el gobierno mexicano no ha emitido comentarios sobre el anuncio. Sheinbaum espera conversar con Trump el jueves antes de su conferencia matutina, reprogramada para el mediodía, y ha adelantado que el domingo presentará las medidas que tomará durante un mitin en el Zócalo de Ciudad de México.