El vórtice polar alcanzó su punto máximo el miércoles en gran parte de Estados Unidos, con temperaturas tan frías que incluso la gélida Groenlandia parecía un destino más cálido en comparación. Para ponerlo en perspectiva, esta semana Marte ha registrado temperaturas más altas que Dakota del Norte.
Pero hay un respiro en el horizonte. Se espera que algunas de las zonas más frías del país experimenten un aumento de hasta 32 grados Celsius (90 grados Fahrenheit) la próxima semana, antes de que una nueva ola de aire polar regrese a principios de marzo, según los meteorólogos.
El contraste térmico es notable. Nuuk, la capital de Groenlandia, registró el miércoles por la mañana 1 °C (34 °F), lo que la hacía 6 °C (11 °F) más cálida que Washington, D.C. Mientras tanto, la temperatura mínima promedio en los estados contiguos de EE. UU. fue de -10,2 °C (13,7 °F) y se prevé que el jueves baje aún más, aunque solo una décima de grado, según el meteorólogo Ryan Maue, ex científico en jefe de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica.
